Ya conocemos la fascinación que provoca en los japoneses las diferentes flores estacionales que se encuentran en parques, templos y santuarios, como los cerezos, hortensias, glicinias o higanbana… incluso sin flores como ocurre con el momiji en otoño.
Aunque la flor por excelencia que los japoneses veneran, por lo que significa, es la sakura (flor del cerezo), lo cierto es que también el día 9 de septiembre se celebra el Festival del Crisantemo, llamado Kiki no Sekku. Antiguamente se conocía como Chōyō no Sekku siendo una de las gosekku, las cinco festivales estacionales que suelen coincidir el número del día con el del mes, en este caso el noveno día del noveno mes.
El crisantemo también es especial por que es la flor oficial de la familia imperial y de hecho es el escudo de la familia aunque realmente el origen de esta fiesta se remonta a los chinos donde la coincidencia del noveno día con el noveno mes auguran buena suerte, además de ahuyentar a los malos espíritus, e importando algunas tradiciones como beber vino de crisantemo.
Los japoneses además aprovechan la ocasión para llenar espacios públicos con exhibiciones de crisantemos en todas su variedades, se calcula que hay más de 30 en el país, dándoles diferentes formas, algunas de ellas muy espectaculares.
