Durante el mes de mayo, se lleva a cabo en Kioto uno de los festivales más vistosos de la ciudad, el Aoi Matsuri, que junto al Jidai Matsuri y al Gion Matsuri, comprenden los 3 festivales mayores de Kioto.
Los orígenes de este matsuri se remontan a la era Heian (794 d.C. – 1185 d.C.). Este periodo es conocido por ser un lugar donde la corte desarrolló abiertamente las artes, y los ropajes usados en este festival imitan a los usados en la corte.
Aunque el origen es bastante anterior, debido a unas tormentas desastrosas que estropearon la cosecha y provocaron hambruna y epidemias a la población. Los videntes determinaron que era la furia de las divinidades de los santuarios Kamo los que la habían provocado. Así que el emperador mandó una comitiva con una mensajero imperial a caballo y una Saiō-Dai, una mujer de la familia imperial para ofrecerla a los dioses como novicia.
A lo largo del tiempo, este festival se ha ido celebrando de forma muy irregular hasta que se restableció definitivamente tras la Segunda Guerra Mundial. Actualmente es uno de los festivales más multitudinarios de Kioto, con un desfile que lleva a más de 600 integrantes, compuesto por el Mensajero Imperial a caballo y la Saiō-Dai, que a día de hoy es una mujer soltera de Kioto, siendo uno de los mayores honores que puede recibir una mujer socialmente en la ciudad en determinados círculos; hasta se anuncia en la prensa y debe pasar por varios rituales de purificación antes del festival.
Aunque se celebra durante todo el mes de mayo, el desfile como tal se lleva a cabo el 15 de mayo bien tempranito cuando sale desde el Palacio Imperial de Kioto hacia los santuarios Shimogamo y Kamigamo donde el Mensajero Imperial y la Saiō-Dai recitarán para pedir el favor de los kami de esos santuarios.
La comitiva de 600 personas no es homogénea, sino que lleva diferentes grupos de personas imitando a la corte imperial de la era Heian, vestidos cada uno como toca con sus abalorios y ropajes, usando hojas y flores como tocado. De hecho, el nombre de Aoi Matsuri, se lo debe a las flores «aoi», un tipo de malva de la que se usan sus hojas y flores en diferentes rituales asociados al festival, además de para ponerse sus hojas en la cabeza, aunque como es una planta en verdad bastante rara, se usan otro tipo de plantas cuayas hojas y flores se le parece como el jengibre salvaje o las del árbol katsura.
Al Aoi Matsuri también se le relaciona con el arte del Yabusame, tiro con arco a caballo, donde se hace una exhibición bastante imponente de esta disciplina. El origen de esta actividad en el festival se debe a la omnipresente figura del Mensajero Imperial a caballo desde los principios de este ritual y, como el objetivo de este festival era agradar a los dioses y el yabusame tenía esa misión también, pues se terminó por asociarlo a este festival, aunque el yabusame también es popular fuera de festivales.